Quince años de Los Mortero: ni subtes, ni punks
Los hijos rebeldes del rock subterráneo que no son subterráneos, ni tampoco punks. Este 2018 se cumplen 15 años desde que la banda Los Mortero debutara en El Agustino con solo tres temas, sin bajo y apenas trece y catorce años de edad.
En los años 80, La Nave de Los Prófugos, ubicada en las escalinatas de la Universidad Villareal en La Colmena, fue uno de los primeros espacios en comenzar a difundir material de rock subterráneo, entre libros de poesía y películas. “Era una nave para vivir… un punto de encuentro para todos los subtes”, decía el escritor Martín Roldán. De sus fundadores, en la década siguiente, nacería Mauricio Vicente, vocalista de Los Mortero, destinado a crecer desde chico escuchando a bandas de la mancha subte y viendo de cerca a personajes como Daniel F, Rafo Ráez, Los Mojarras, Del Pueblo Del Barrio.
A los trece años, junto a su hermano, y casi por necesidad básica, les nació la idea de formar una banda, así, sin saber tocar nada de nada. Al año siguiente, en el 2003, debutaron bajo el nombre de Mortero, en una discoteca llamada Estilos en El Agustino, junto a Daniel F y bandas del distrito.
Poco a poco, con el tiempo, se fueron metiendo a tocar el circuito del Centro de Lima, con bandas como Morbo, Desakuerdo y Suicidas. Al año hacían siete u ocho conciertos. Comenzaron a tocar también en El Averno. Pero durante el 2005 y el 2006, la banda paró y “estaba prácticamente muerta”, dice Mauricio.

mortero en el averno
En el 2006, apareció en un compilado subte, claro, llamado Tu Mamá Calata con la canción “La Muerte y yo”. En el 2007, sacaron "El Perú Progresa", su primer EP. Aún casi nadie los conocía. Hasta que en el 2010, el nombre de la banda se torna plural y bajo “Los Mortero”, lanzan el primer disco oficial de la banda: “Pisar un bicho”. Y entonces, la cosa se iba a ir poniendo seria.
“En el primer disco el Pisar un bicho, ya la banda está encontrando un estilo no tanto punk ni hardcore, sino más rock and roll, con mezcla de ritmos que nos vacilan, no tan ortodoxos, que nos permitan jugar más. Eso es lo que me gusta del primer disco. Igual sigue con una actitud cruda, sigue con algo contestatario que es lo bueno que se mantiene en Mortero siempre”, dice Diego Vicente. De hecho el tema social en las letras siempre ha estado presente en los discos de la banda. ¿Una herencia subterránea?
“En los 80’s las cosas eran mucho más extremas y violentas. Y en los 2000’s, las cosas son más libres y dialogantes. Igual siempre hay cosas que van a estar mal y que son criticadas mediante las manifestaciones artísticas que tiene cada generación. Y el rock siempre se ha ido asociando con la crítica, con la rebeldía, o con un discurso que está más comprometido con la realidad”, dice Bruno Peña, guitarrista de los Mortero. “Creo que la música es una herramienta y tenemos siempre la obligación de poder decir. Puedo decir que me muero por alguien o también puedo decir algo sobre la sociedad. En ese aspecto, sí tenemos un rollo crítico a la sociedad y al sistema, creo que en eso Mortero también coincide. Cada uno tiene su trabajo y todo pero en nuestro día a día también aplicamos lo que creemos”, agrega Diego Vicente, también guitarrista de la banda.
Por todos los antecedentes descritos, la banda comenzó a ser tildada de punk y subterránea. Pero, ¿era una banda subterránea? Años después, Los Mortero dejarían en claro que no son ni lo uno ni lo otro. “No nos sentimos una banda subte, ni una banda punk. El movimiento subterráneo es un movimiento que comprende entre los 80’s y 90’s ahora ya no existe, al menos en mi parecer o en el parecer de mi banda. El movimiento subterráneo fue un movimiento que tuvo sus características, la manera de ver, sentir, marcada por su época, y también un manera de resistir en una época jodida por el terrorismo, la dictadura y otras cosas más. Pero ahora no, ahora hay otras cosas, hay otros tipos de preocupaciones, otras cosas por las cuales luchar, hay más facilidad también. No nos creemos subterráneos, para nada”, dice Mauricio en una entrevista que le hicimos hace unos años.

FOTAZO POR RAÚL "EL AVIÓN" GARCÍA
Para fines de la primera década de los dos miles, había cada vez menos festivales, y Los Mortero como otras bandas comenzaron a forjarse en nuevos espacios y locales de partidos políticos que alquilaban sus espacios para conciertos. En el 2011, el nombre de la banda ya iba sonando entre la gente que había sobrevivido a la muerte de los festivales y la nueva generación que comenzaba a crecer asistiendo a los concier-tonos. Se iba formando una nueva escena. A fines del siguiente años, en el 2012, presentan su segunda placa “Vivo por la lucha”, un disco de rocanrol con mezclas de ska, cumbia, hardcore y algunos toque de reggae, con letras que siguen incluyendo temas de realidad social sin dejar de lado otras expresiones.
Ah, sí, al mismo tiempo los pasos de baile desenfrenados y adrenalínicos de Mauricio Vicente se iban tornando mucho más populares en los conciertos, además de su gran desempeño como frontman sobre el escenario para sobrellevar, con igual capacidad, desde el concierto más pequeño hasta el más grande. Hay pocos así en la escena contemporánea.
Cuando regresaron festivales como Rock en el Parque, se crearon otros como Lima Vive Rock, entre otros más, la banda comenzó a ingresar al cartel de los conciertos masivos. Pronto ganaron el concurso de Converse Rubber Tracks, con el que pudieron grabar los temas para su ep “La Tormenta” (2016). Se formó una komuna en aliento a la banda llamada “Somos Los Mortero”. Y así. En paralelo, aparecieron en el fanzine punk norteamericano más conocido del mundo Maximum RockNRoll. De cuando en cuando han regresado a El Agustino, el barrio que vio nacer a sus fundadores. Y, actualmente, el público sigue coreando sus canciones tanto en el festival más grande como en el bar más chiquito y cochino del Centro de Lima donde se presenten.
A pesar de sus innegables raíces subtes, Los Mortero han sabido crecer como banda sin principios ortodoxos, sosteniendo su propia ética, lo que les ha permitido profesionalizar su trabajo a la vez que seguir manteniendo su independencia para hablar sobre los temas que quieran en su música, y experimentar con sonidos tan diversos como la cumbia, el ska y el punk. Todo eso sin ser subtes ni punks en estos primeros quince años de rocanrol.

15 AÑOS DE LUCHA.
Este sábado 7 de abril, Los Mortero se presentarán en la Oficina Bar (Jr. Cailloma 843, Centro de Lima) junto a Suicidas, La Nueva Invasión, La Maldita Costumbre y Sin Comillas, para celebrar su primer quino. Más info. aquí .
El rocanrol es nuestra cultura y nuestra contracultura. Si significa lo mismo para ti, suscríbete aquí. Y si deseas que escuchemos tu música o difundamos tu proyecto, contáctanos aquí.
★ Y O U C A N S A Y F U C K también ha publicado:
5 años de El Anexxxo: ¿Cuál es filin de tener una tienda de discos hoy?
Cómo se vive el rock venezolano hoy en tiempos del “ex – rockero” Nicolás Maduro
Este rock millennial también protesta: canciones de crítica social y política
Últimos partos de la escena: Nuevas bandas para que el rock peruano no muera